UNO
—Suicídate conmigo —Acariciará tu cara con su guante de piel negro.
Aunque habrás intentado detenerla antes, y su situación no será más que culpa tuya, te causará lastima verla apunto de ahogarse. No será un suicidio: inevitablemente morirá y tú serás culpable. Suicidarte con ella será una opción, más fácil de lo que cuesta pronunciarlo, pero no querrás irte aún.
Aunque habrás intentado detenerla antes, y su situación no será más que culpa tuya, te causará lastima verla apunto de ahogarse. No será un suicidio: inevitablemente morirá y tú serás culpable. Suicidarte con ella será una opción, más fácil de lo que cuesta pronunciarlo, pero no querrás irte aún.
Mirarás su rostro recién construido, pálido, sin color; el miedo le revolverá el estómago y confundirá su cabeza. Mirarás hacia atrás y encontrarás el mismo fúnebre paraíso.
Estará paralizada y el agua empezará a subir y a mover sus abrigos negros y bufandas grises. Acurrucarás en ellos tu cuerpo desnudo y asentirás. Buscarás sus labios y la besarás. Quizá, como tú, escapará una vez más.
Después de eso, la habitación se irá haciendo más oscura y más fría; sentirás el delicioso placer del agua helada llegando y casi congelando tus piernas, dejarás que penetre en tu sistema respiratorio y sucumbirás.
Aparecerás en una habitación de tu infancia. Paredes pintadas color salmón, un techo descarapelado, una puerta de malla despintada y oxidada con restos de azul. Tres sillas y una mesa vieja. Esconderás tu cuerpo, aún desnudo, debajo de la mesa, y las verás entrar:
Lucy y su hermana mayor Naye. Jugarán contigo como antes lo hacían, te prestarán cobijas pesadas para cubrir tu desnudez. Más tarde caminarás por los molinos, enormes y aparentemente desérticos: no habrá nadie, no podrás gritar, no podrás correr.
Sin sentido buscarás su presencia: esta vez no está ahí; está vez está lejos; quizá está vez sí se esfumó.
Por último te darás cuenta de que sueñas, te costará concentrarte para despertar. Sentirás tu cuerpo pesado, y te darás cuenta de que ahora es ella la que está sobre ti. Ella desnuda y tu cuerpo con ropas negras y pesadas. El grifo estará abierto y no te podrás mover, quedarás bajo su cuerpo, con su cabello rubio alrededor de tu cuello.